El 22 de marzo de cada año se celebra el Día Mundial del Agua con el propósito de concientizar acerca de la relevancia del uso responsable y solidario de este recurso natural y enfatiza en recordar  la crisis mundial del agua y la necesidad de implementar medidas para  su correcta utilización y cuidado.

Según manifiesta la Organización Mundial de la Salud (OMS) “si bien se ha conseguido progresar de manera sustancial en la ampliación del acceso al agua potable y al  saneamiento, existen todavía millones de personas en el mundo que aún carecen de los servicios básicos”.

La pandemia de la Covid-19 puso de manifiesto la importancia vital de la  higiene y el acceso adecuado al agua limpia para prevenir y contener las enfermedades, entre ellas la propagación de este virus y de otras infecciones. Por eso desde los diferentes organismos de salud se hizo hincapié en la correcta higienización de las manos con agua  y jabón, con la consigna de que el agua  ayuda  a “salvar vidas”.

Aguas subterráneas:” Hacer visible lo invisible”

A nivel mundial este año se utiliza el  lema  «Aguas subterráneas: Hacer visible lo invisible” y pretende hacer foco en las aguas que se encuentran bajo tierra, en los acuíferos, que son esenciales para la vida porque de este recurso depende gran parte del planeta, donde una gran proporción de la misma se utiliza para fines de consumo, saneamiento, producción de alimento y procesos industriales.

La lluvia y la nieve son las principales fuentes  de recarga de las aguas subterráneas que se infiltran en el suelo y se acumulan en formaciones de rocas, arenas, gravas y  pueden extraerse a la superficie por medio de bombas y pozos. Además estas corrientes de agua alimentan manantiales, ríos, lagos y humedales y finalmente se filtran a los océanos.

En este día es esencial tomar conciencia de la protección y conservación del recurso hídrico tan necesario para la vida en el planeta y el equilibrio de los ecosistemas.